¿Qué precio poner a mi producto o servicio?
Julio 21, 2023
¡Decidir cuánto cobrar por tus productos o servicios puede ser un verdadero dolor de cabeza! ¿Estaré cobrando muy caro? ¿Estaré casi que regalando lo que hago? A mí antes me pasaba al momento de decidir
qué precio ponerle a mis cursos y conferencias, pero poco a poco me fui formando en este aspecto y aquí estoy para ayudarte a entender cómo y qué precio poner a lo que ofreces.
Entendiendo los costos: No vayas a la quiebra
Puede que tus productos sean tan buenos que los reyes mismos quieran comprarlos, pero si no tienes en cuenta los costos, podrías terminar en bancarrota antes de que puedas decir "¡vendido!". Para evitar esto,
entiende bien los costos asociados con la producción de tu producto o la prestación de tu servicio.
¿Tienes una pastelería? Suma el costo de la harina, los huevos, el azúcar, la electricidad para hornear... y no te olvides de los costos indirectos como el alquiler del local o la publicidad. Solo cuando conozcas todos tus costos, podrás fijar un precio que te permita mantener tu negocio a flote.
El valor percibido: lo que está en la mente del cliente
Puede que vendas zapatos hechos a mano. A pesar de que te cuestan 30 dólares producirlos, en la mente de tus clientes, podrían valer mucho más. Tal vez aprecian el diseño único, la comodidad o el hecho de que están hechos a mano por un artista local.
Ese es el valor percibido, y es una gran herramienta para fijar precios.
Si tus clientes perciben que tu producto tiene un alto valor, puedes ponerle un precio más alto. Pero cuidado, no puedes simplemente decidir que tu producto tiene un alto valor. Debes demostrarlo.
Ofrece una excelente atención al cliente, una presentación impresionante y, por supuesto, un producto o servicio de alta calidad.
Análisis de la competencia: No te quedes fuera de juego
Por muy únicos que sean tus productos, probablemente existan competidores similares. Investigando sus precios entenderás dónde te encuentras en el mercado. ¿Son tus productos más baratos? ¿Más caros? ¿Proporcionan más valor?
Digamos que vendes clases de yoga. Si la mayoría de tus competidores cobran 10 dólares por clase y tú cobras 30, podrías quedarte fuera del juego. A menos, claro está, que ofrezcas algo extra que justifique el precio más alto.
Tal vez tus clases son más pequeñas, lo que permite una atención personalizada. O tal vez eres el único instructor de yoga en la ciudad que se especializa en yoga para embarazadas.
Estrategia de precios: Jugar con los números
Existen muchas estrategias para fijar tus precios. Por ejemplo, utilizar
la estrategia de "precios bajos" si quieres atraer a una gran cantidad de clientes. O la de "precios premium" si tu producto es de alta calidad y quieres atraer a un público de alto poder adquisitivo.
También juega con los números. Algunas investigaciones sugieren que los precios que terminan en .99 o .95 se perciben como significativamente más bajos que los que terminan en .00. ¡Así que quizás quieras vender tus cupcakes por 2.99 en lugar de 3 euros!
Encontrar el precio correcto es un proceso de prueba y error. No te desesperes si no aciertas a la primera. Ajusta tus precios según las reacciones de tus clientes, los cambios en los costos o las tendencias del mercado.
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